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14/07/17
La crisis que viene atravesando la producción a nivel nacional no ha dejado afuera a nuestra ciudad. Las suspensiones, toma de vacaciones obligadas y despidos sistemáticos que se vienen dando en las fábricas de Mercedes son el ejemplo más claro de que se ha cumplido el pacto de gobernabilidad de Ustarroz hacia Vidal y Macri. Hace unos meses atrás fuimos testigos de una reunión del intendente local con dirigentes sindicales de distintos gremios, encabezando en representatividad Baradel, quien hace pocos días firmó un acuerdo a la baja para los docentes de la provincia, justo antes de la primera instancia electoral de agosto. La entrega de los trabajadores corre para el resto de los convidados como es el caso del gremio del cuero que se ha mantenido pasivo frente a los despidos que se vienen realizando y afectan a cientos de trabajadores. En Mercedes fábricas como Magromer vienen despidiendo desde hace años a trabajadores precarizados que ingresan a través de contratos basura que no son renovados luego de los tres meses. El jefe de recursos humanos de esa empresa integra hoy el gabinete del gobierno municipal, otro botón de muestra para entender que mas allá de la demagogia que pueda querer instalar el FPV local ha gobernado con los representantes empresariales al igual que el gobierno nacional lo ha hecho. El contexto de crisis venía siendo previsto desde hace años, por eso es que hace dos años dijimos que era necesario que se votara una ordenanza local contra los despidos en nuestra ciudad como se ha hecho en otros municipios. Debemos frenar la crisis de ocupación laboral en Mercedes que se manifiesta no solo en los despidos sino en la precarización laboral que lleva a los trabajadores a recurrir a jornadas extendidas a través de las horas extras, y obtener un salario que los mantenga fuera de la miseria. La acción de sus compañeros fue ejemplar: pararon inmediatamente la producción. Desde el Partido Obrero saludamos esa acción y nos solidarizamos con el compañero herido. Entendemos que como en otros casos (en estos momentos en que escribo esta nota están llevando a cabo el desalojo de Pepsico), los trabajadores que vienen acumulando enormes e importantes experiencias, deben avanzar hacia la organización fabril, a partir de comisiones internas electas por los compañeros, que actúen como defensa frente a los atropellos de la patronal que los obligan a ritmos laborales extenuantes. En esta línea es que planteamos la necesidad imperiosa de un paro de toda la seccional metalúrgica, que derrote la precariedad laboral en todas las fábricas mercedinas y ponga en la mesa de discusión la situación laboral. La cadena de la precarización laboral en Mercedes tiene varios eslabones, desde los contratos basura, los despidos, las suspensiones, las vacaciones adelantadas, las mutilaciones, todo esto con la anuencia de las diferentes tendencias políticas que conviven en el Concejo Deliberante, que no son ninguna oposición a la política nacional sino cómplices de los patrones locales. Esto hace cada vez más necesaria la construcción de un bloque político, que actúe desde una perspectiva obrera frente a la situación de crisis. Que visualice la reorganización de las relaciones laborales desde la visión de los trabajadores y no de los empresarios.
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